Charlie and the chocolate factory

El aparente discurso de la película es: "Vivimos en una sociedad tan viciosa y corrompida con el capitalismo que el sector que se supone más puro e inocente, está embarrado de ciertos defectos"
Y como toda película gringa no puede faltar la esperanza, el protagonista es un niño que a pesar de su humilde origen, no ha perdido su inocencia y calidez humana.

Entonces que es lo que vemos: un niño compulsivo que traga (no come) dulces hasta reventar; una niña malcriada que exige la complacencia de sus más absurdos caprichos; una muchachita engreída tiene que demostrar ser la mejor en todo; un pequeño genio irrespetuoso (bueno todos son irrespetuosos) antipático y agresivo; y por último un niñote agorafóbico que le teme a socializar y a la realidad. ( no que no).
También se subraya que todos son causa de una mala educación de sus padres, por lo que encontraron en sus respectivas obsesiones algún consuelo. Y de alguna manera, al final de la película, ellos lograron trascender y mejorar como individuos, un poco.

Pero no es por su trabajo psicosocial que hago mención de esta obra, eso es demasiado obvio. La menciono porque ante su disfraz de fantasía y estética pop empalagosa, es un un cruel y despiadado estudio de la tortura y la esclavitud.
Ahogar a un niño en grasa de cacao, llenar de gases internamente a una chica hasta la tensión de todos sus tejidos, liberar un manada de salvajes roedores a un niña y arrojarla, así como a su padre, por un profundo agujero desconocido, minimizar y estirar a un chico hasta que aparente ser de sólo dos dimensiones. Y no olvidemos la explotación y el secuestro de toda una cultura, toda una sub-raza, haciendole valer sus derechos como si fueran animales de granja.

Todo esto y más en la más cruel y sádica obra de Tim Burton, Con la colaboración de su inseparable protagonista, Johnny Depp, en su papel más afeminado de todos.